La segunda


.

Pretérito-Indicativo



Ismael trabajó para recuperar la confianza de su padre. Cuando por fin decidió enviarlo a una convención de negocios muy importante, sintió sobre sus espaldas una mezcla de responsabilidad y alegría.

Alta, madura y algo perversa. Cuando la conoció, calculó unos 16 años, aunque el número real resultó mayor. Caminaron, rieron, tomaron té y justo antes de despedirse, se besaron, por petición de ella. Ismael únicamente percibió unos labios sin alma y recordó a Michel.

Casi de inmediato, su padre cerró un negocio que expandió los horizontes de la familia. En el viaje de regreso a casa, él fue claro en sus palabras de felicitación y sus exigencias. Ismael lo comprendió todo y aceptó seguir el ritmo a toda costa.